MUESTRA
Imágenes de un duelo público
Hubo un tiempo en el que los medios de comunicación tradicionales, la prensa gráfica en particular, concentraron la capacidad de capturar el pulso de la historia en el instante en que los hechos laten con fuerza. Sus páginas, son una entrada privilegiada a esos días que cambian el rumbo de los pueblos. En ellas, la tinta se transforma en memoria, y las palabras, en ecos que resuenan a lo largo de generaciones.
En las primeras horas de la tarde del 1 de julio de 1974, la sociedad argentina se enteró a través de una cadena nacional del fallecimiento de Juan Domingo Perón. A partir de ese momento y en los días que siguieron, fue la prensa la que recogió y contribuyó a dar forma -en editoriales y en titulares- a la conmoción que ocupó las calle.
Ese día los periódicos no pudieron ser indiferentes al dolor colectivo y debieron narrar ese luto que reinscribió la relación entre muerte y política en términos aún por descifrar.
Sala virtual